La excedencia voluntaria es un derecho reconocido a los trabajadores en España, regulado por el artículo 46 del Estatuto de los Trabajadores. Consiste en la suspensión temporal de la relación laboral, sin percepción de salario ni obligación de cotizar a la Seguridad Social durante el tiempo en el que se disfruta de la excedencia.
Este periodo puede tener una duración mínima de cuatro meses y un máximo de cinco años, siempre que el trabajador tenga, al menos, un año de antigüedad en la empresa.
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Derecho a la excedencia y requisitos
Para solicitar una excedencia voluntaria, el trabajador debe haber estado al servicio de la empresa por un período mínimo de un año. Se puede pedir sin necesidad de justificar un motivo específico, ya que no está condicionado a la existencia de causas concretas, como sí ocurre con la excedencia por cuidado de hijos o familiares. No obstante, la solicitud de una nueva excedencia voluntaria por parte de un trabajador solo será posible si han transcurrido, al menos, cuatro años desde la finalización de la anterior excedencia.
Durante este periodo, el trabajador no tiene derecho a conservar su puesto de trabajo, sino únicamente a un derecho preferente de reingreso en una vacante de igual o similar categoría que pueda surgir en la empresa. Este derecho preferente solo es aplicable si existen vacantes en el momento en que el trabajador solicita su reincorporación.
Diferencias con la excedencia por cuidado de hijos o familiares
Es importante destacar las diferencias con la excedencia por cuidado de hijos o familiares. Estas modalidades permiten al trabajador reservar su puesto de trabajo durante el primer año de excedencia, y en el caso de que tenga una familia numerosa, este periodo puede extenderse hasta 18 meses. Pasado este tiempo, la empresa solo está obligada a ofrecer un puesto de trabajo en la misma categoría o grupo profesional.
Por otro lado, la excedencia voluntaria, en su modalidad común, no otorga ese derecho de reserva de puesto, sino simplemente un derecho preferente a una vacante, lo que puede complicar el reingreso del trabajador.
Compatibilidad con el trabajo en otra empresa
El trabajador que está en excedencia voluntaria tiene la posibilidad de trabajar para otra empresa durante este periodo, siempre y cuando no incurra en competencia desleal con su empleador original. Este punto es crucial, ya que la excedencia voluntaria no implica una desvinculación completa de la empresa. De hecho, si el trabajador fuera despedido de ese nuevo empleo, tendría derecho a solicitar la prestación por desempleo, siempre que la extinción del contrato haya sido involuntaria.
En este caso, solo se tendrán en cuenta las cotizaciones realizadas en la nueva empresa y no en la que le concedió la excedencia.
Procedimiento de reincorporación
Para reincorporarse al trabajo una vez finalizado el período de excedencia, el trabajador debe solicitar su reingreso antes de que esta finalice. La empresa tiene la facultad de aceptar el reingreso si hay vacantes disponibles, pero también puede denegar la solicitud si no existen puestos de trabajo libres en ese momento. En caso de negativa injustificada o de que la empresa no responda a la solicitud del trabajador, este podría considerar que se ha producido un despido tácito y recurrir judicialmente por despido improcedente.
El reingreso, sin embargo, no se produce automáticamente. Si la empresa alega la inexistencia de vacantes, el trabajador no podrá reincorporarse inmediatamente, pero conservará su derecho preferente hasta que surja una vacante adecuada.
Es importante tener en cuenta que la negativa al reingreso basada en la inexistencia de vacantes no se considera despido, salvo que se demuestre lo contrario en un proceso judicial.
Vacantes a tiempo parcial o temporal
Si la empresa solo tiene vacantes a tiempo parcial o temporales, el trabajador en excedencia tiene derecho a aceptar o rechazar estas ofertas, manteniendo siempre su derecho a reincorporarse a un puesto a tiempo completo en cuanto se produzca una vacante de esa naturaleza. La aceptación de una vacante temporal o a tiempo parcial no implica la pérdida de su derecho preferente a reingresar en una vacante a tiempo completo cuando esta surja.
Jurisprudencia y derechos del trabajador
En situaciones donde la empresa no facilita la reincorporación o donde la denegación del reingreso no está justificada, el trabajador puede recurrir a los tribunales. La jurisprudencia ha ratificado que, en caso de negativa injustificada o falta de respuesta, el trabajador puede demandar por despido improcedente y reclamar una indemnización o la reincorporación forzosa.
Conclusión
La excedencia voluntaria es una herramienta útil para los trabajadores que necesitan suspender temporalmente su relación laboral, ya sea por motivos personales o profesionales. Sin embargo, es fundamental que tanto los trabajadores como los empleadores conozcan bien sus derechos y obligaciones, especialmente en lo que respecta al proceso de reincorporación.
El éxito en la solicitud de reingreso dependerá de la existencia de vacantes en la empresa, y el trabajador debe estar preparado para ejercer sus derechos preferentes de manera adecuada. Asimismo, la compatibilidad de la excedencia con el empleo en otra empresa ofrece al trabajador una mayor flexibilidad, pero con la obligación de evitar cualquier conflicto de intereses con su empleador original.