En este artículo, te proporcionaremos una guía completa sobre las indemnizaciones y prestaciones en los accidentes laborales. Exploraremos las diversas coberturas que la Seguridad Social y, en algunos casos, la empresa, deben brindar a los trabajadores afectados. También te ofreceremos una tabla de indemnizaciones por accidente laboral a modo de resumen.
¡Comencemos!
Índice de Contenidos
Protección en los accidentes de trabajo
Cuando un trabajador sufre un accidente laboral, lo que incluye incidentes ocurridos durante los trayectos de ida y vuelta al trabajo, se generan una serie de derechos para el afectado. Estos derechos están diseñados para compensar el daño causado y las secuelas del accidente.
A continuación, te detallamos los principales derechos:
Reconocimiento de prestaciones
El trabajador tiene derecho a recibir una serie de prestaciones, que incluyen la baja médica, indemnización por lesiones permanentes no invalidantes y/o incapacidad permanente, en caso necesario. Estas prestaciones son abonadas por la mutua, ya que se consideran contingencias profesionales, es decir, accidentes ocurridos durante el trabajo y no en momentos de ocio.
Alta en la Seguridad Social
Es responsabilidad del empleador dar de alta al trabajador en la Seguridad Social. Si este trámite no se realizó en el momento de la contratación, el empleado será dado de alta automáticamente en el sistema.
Recargo de prestaciones
Cuando un accidente laboral es resultado de una falta de medidas de seguridad o prevención de riesgos laborales, el empleador debe asumir el pago de un recargo económico en las prestaciones otorgadas al trabajador accidentado. Este recargo no es una indemnización única, pero supone un aumento en la cantidad que se recibe mensualmente.
Mejoras voluntarias
Las empresas pueden optar por complementar el importe de la baja laboral o ofrecer seguros de convenio, que se cobran en caso de reconocimiento de una incapacidad permanente. Sin embargo, estos seguros pueden tener requisitos específicos.
Otras indemnizaciones
Además de las prestaciones mencionadas, existe la posibilidad de acceder a indemnizaciones adicionales en caso de responsabilidad criminal o civil por parte de la empresa.
Como puedes ver, las indemnizaciones no son el único tipo de compensación en los accidentes laborales. Estos mecanismos también son aplicables en caso de enfermedad profesional.
¿Cuánto se cobra estando de baja por accidente de trabajo en 2023?
La primera consecuencia de un accidente laboral es el inicio de un proceso de incapacidad temporal o baja médica, en caso de lesiones que lo requieran. Durante este período, el empleado no recibe una indemnización por accidente de trabajo propiamente dicha, sino que suspende su actividad laboral mientras recibe una prestación.
Esta prestación corresponde al 75% de la base reguladora desde el primer día de la baja. Sin embargo, muchos convenios obligan al empleador a completar el ingreso hasta el 100% de la base reguladora.
El pago de la baja laboral es responsabilidad de la mutua, que también debe realizar un seguimiento médico de la evolución del trabajador accidentado y proporcionarle los tratamientos necesarios.
Lesiones permanentes no invalidantes
Una vez finalizada la baja laboral, la Seguridad Social puede reconocer una indemnización por lesiones permanentes no invalidantes (LPNI). Estas indemnizaciones se financian a través de las arcas de la mutua. Las LPNI abarcan lesiones, mutilaciones y deformidades permanentes que, aunque no afectan negativamente la capacidad laboral, alteran la integridad física del empleado. En consecuencia, el trabajador puede seguir desempeñándose en la empresa.
El monto de la indemnización por lesiones permanentes no invalidantes se calcula de acuerdo con un baremo establecido, pero generalmente estas cantidades son modestas. Es importante destacar que la persona debe haber obtenido el alta médica y que la contingencia sea un accidente laboral o una enfermedad profesional.
Incapacidad permanente por accidente laboral
La incapacidad permanente también puede otorgarse mientras el trabajador está de baja. Sin embargo, no es compatible con el cobro de una indemnización por LPNI. La incapacidad permanente se concede cuando las secuelas de las lesiones producto del accidente limitan la capacidad laboral del individuo y son previsiblemente definitivas. En caso de que el origen sea un accidente de trabajo, la mutua es responsable de realizar el pago correspondiente.
Existen diferentes tipos de incapacidad permanente: parcial, total, absoluta o gran invalidez. El grado de incapacidad se determina según la limitación de las secuelas. Solo la incapacidad permanente parcial es una indemnización, no una pensión mensual. Las demás modalidades de incapacidad otorgan una pensión mensual, que varía en porcentaje según el grado de incapacidad.
Recargo de prestaciones
En el ámbito de las prestaciones derivadas de accidentes de trabajo o enfermedades profesionales, existe la posibilidad de incrementar su cuantía cuando se comprueba el incumplimiento de las normas de prevención de riesgos laborales por parte del empleador. Esto se conoce como recargo de prestaciones.
El recargo de prestaciones se materializa a través de un incremento mensual que se suma a la prestación y recae en el empleador. Por lo tanto, no se considera una indemnización única.
Para aplicar un recargo de prestaciones por accidente laboral, es necesario probar la existencia de culpa o negligencia por parte del empleador y establecer una relación de causalidad clara entre dicha conducta y la lesión sufrida por el trabajador.
El importe adicional que se añade a la prestación, ya sea por incapacidad temporal o permanente, es de entre un 30% y un 50% respecto a su valor. Por ejemplo, si un pensionista de incapacidad absoluta recibe una pensión de 1.000 € al mes, su pensión aumentaría como mínimo a 1.300 € y como máximo a 1.500 €.
El cálculo se realiza teniendo en cuenta la gravedad de los incumplimientos, el nivel de riesgo inherente a las actividades laborales, la conducta general de la empresa en relación a la prevención y otras circunstancias relevantes que hayan contribuido al accidente.
Otras indemnizaciones en los accidentes laborales
Además de las indemnizaciones y prestaciones mencionadas anteriormente, existen otras compensaciones que pueden aplicarse en los accidentes laborales. A continuación, te presentamos algunas de ellas:
Indemnización del seguro de convenio
Algunos convenios colectivos establecen el pago de un seguro contratado por la empresa con una compañía aseguradora. Esta indemnización se concede al trabajador una vez que se ha reconocido su incapacidad permanente. Por lo general, estas indemnizaciones se centran en accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, aunque algunos convenios también pueden cubrir contingencias comunes.
Es importante señalar que la mayoría de las aseguradoras requieren que el beneficiario sea pensionista de incapacidad absoluta. Los casos en los que se aprueba una indemnización de este tipo para un trabajador con incapacidad total son más excepcionales.
Complemento de empresa a la baja médica
Aunque ya no se considera una indemnización por accidente de trabajo propiamente dicha, muchas empresas, especialmente las grandes compañías, complementan el pago de la incapacidad temporal. De esta manera, se garantiza que el trabajador reciba el 100% de su base reguladora durante el período de baja. Por lo general, este complemento se aplica indistintamente a las contingencias laborales y no laborales.
Responsabilidad civil de la empresa
Si bien la Seguridad Social proporciona una cobertura económica en caso de accidente de trabajo, esto no excluye la posibilidad de demandar a la empresa si esta es responsable de daños y perjuicios adicionales sufridos por la víctima, más allá de las prestaciones del sistema. La responsabilidad civil es independiente del recargo de prestaciones y ambas compensaciones son compatibles.
Reclamación de daños y perjuicios
En caso de sufrir un accidente laboral, el trabajador tiene un plazo de un año para presentar una demanda de indemnización por daños y perjuicios. Este plazo generalmente comienza después de la resolución que reconoce el origen y el grado de incapacidad permanente del trabajador. Estos procesos también pueden llevarse a cabo por vía penal si se cumplen los requisitos necesarios y se ha puesto en grave peligro la vida o la salud del trabajador. En casos extremos, esto puede resultar en una pena de prisión.
Conclusión
Durante los primeros ocho meses de 2023, según las estadísticas del Ministerio de Trabajo y Economía Social, se registraron en España 411,861 accidentes laborales que resultaron en un proceso de baja médica. Además, se reportaron otros 374,708 accidentes que no generaron una incapacidad temporal posterior.
¿Significa esto que todos los casos fueron leves? ¿O muchos trabajadores tuvieron que continuar trabajando a pesar de sus lesiones? Estos datos no se reflejan en las estadísticas oficiales y nos llevan a reflexionar sobre la presión que enfrentan los trabajadores para volver al trabajo, incluso después de haber sufrido un accidente laboral.
Los accidentes de trabajo continúan siendo una preocupación significativa en el ámbito laboral y social. No solo afectan a aquellos que siguen trabajando a pesar de las lesiones, sino también a aquellos cuyas vidas han sufrido un cambio completo. Es fundamental que los trabajadores conozcan sus derechos y las prestaciones a las que tienen derecho en caso de sufrir un accidente laboral.
Además, es importante que las empresas cumplan con las normas de seguridad y prevención de riesgos laborales para evitar accidentes y proteger la salud y la integridad de sus empleados.
Si has sufrido un accidente laboral, te recomendamos buscar asesoramiento profesional para comprender mejor tus derechos y opciones legales, en LATERNA podremos ayudarte!
